[1] [2] [3] [4] [5] [6] [7] [8] [9] [10] [11] [12] [13] [14] [15] [16] [17] [18] [19] [20] [21] [22] [23] [24] [25] [26] [27] [28] [29] [30] [31] [32] [33] [34] [35] [36] [37] [38] [39] [40]
1:1 ESTOS son los nombres de los hijos de Israel, que entraron en Egipto con Jacob; cada uno entró con su familia. 1:2 Rubén, Simeón, Leví y Judá; 1:3 Issachâr, Zabulón y Benjamín; 1:4 Dan y Nephtalí, Gad y Aser. 1:5 Y todas las almas de los que salieron del muslo de Jacob, fueron setenta. Y José estaba en Egipto. 1:6 Y murió José, y todos sus hermanos, y toda aquella generación. 1:7 Y los hijos de Israel crecieron, y multiplicaron, y fueron aumentados y corroborados en extremo; y llenóse la tierra de ellos. 1:8 Levantóse entretanto un nuevo rey sobre Egipto, que no conocía á José; el cual dijo á su pueblo: 1:9 He aquí, el pueblo de los hijos de Israel es mayor y más fuerte que nosotros: 1:10 Ahora, pues, seamos sabios para con él, porque no se multiplique, y acontezca que viniendo guerra, él también se junte con nuestros enemigos, y pelee contra nosotros, y se vaya de la tierra. 1:11 Entonces pusieron sobre él comisarios de tributos que los molestasen con sus cargas; y edificaron á Faraón las ciudades de los bastimentos, Phithom y Raamses. 1:12 Empero cuanto más los oprimían, tanto más se multiplicaban y crecían: así que estaban ellos fastidiados de los hijos de Israel. 1:13 Y los Egipcios hicieron servir á los hijos de Israel con dureza: 1:14 Y amargaron su vida con dura servidumbre, en hacer barro y ladrillo, y en toda labor del campo, y en todo su servicio, al cual los obligaban con rigorismo. 1:15 Y habló el rey de Egipto á las parteras de las Hebreas, una de las cuales se llamaba Siphra, y otra Phúa, y díjoles: 1:16 Cuando parteareis á las Hebreas, y mirareis los asientos, si fuere hijo, matadlo; y si fuere hija, entonces viva. 1:17 Mas las parteras temieron á Dios, y no hicieron como les mandó el rey de Egipto, sino que reservaban la vida á los niños. 1:18 Y el rey de Egipto hizo llamar á las parteras y díjoles: ¿Por qué habéis hecho esto, que habéis reservado la vida á los niños? 1:19 Y las parteras respondieron á Faraón: Porque las mujeres Hebreas no son como las Egipcias: porque son robustas, y paren antes que la partera venga á ellas. 1:20 Y Dios hizo bien á las parteras: y el pueblo se multiplicó, y se corroboraron en gran manera. 1:21 Y por haber las parteras temido á Dios, él les hizo casas. 1:22 Entonces Faraón mandó á todo su pueblo, diciendo: Echad en el río todo hijo que naciere, y á toda hija reservad la vida.